A esta hora tan próxima
al amanecer, todo está en silencio,
todo es azul casi negro.
Se siente y se huele la humedad,
el cuerpo suda,
se estremece, tiembla en su sueño,
el eco de mil penas
se escapa en un suspiro.
La urgencia del deseo la desvela,
un extraño sentimiento
ha crecido dentro de su pecho
la humedad de sus ojos
atrapa la luz
cuando amanece como cada día,
aunque no esté a su lado
y tan solo desea
volver a besarlo
para volver a tocar el cielo
perderse en el borde
de sus labios
abrazarse fuerte a su cuerpo
y que tantas lágrimas
como besos cubran de amor
su cuerpo.