poemas sobre la familia

En esta poesía de la familia he recogido todos mis poemas de agradecimiento a mi familia, porque la mayor riqueza de la vida es la familia y los recuerdos que atesoramos a lo largo de nuestra existencia.

Poemas a la familia que se pueden compartir con los hijos, los padres, los abuelos, en los que la ternura y el amor fluyen uniendo corazones. Podrás leer un poema a los abuelos o un poema a un hijo.

Poema a los abuelos


Los abuelos siempre guardan amor en su corazón para transmitirlo, por eso no podía faltar un rincón de poesía para los abuelos.

Una poesía dedicada a los abuelos con la que inspirarte para escribir poemas para tu abuela o para tu abuelo para transmitirle todo el amor y admiración que sientes por ellos.

Un vínculo que no se pierde nunca es el que nos une a ellos y es el que he querido plasmar en los poemas para mi abuela.

Nuestros abuelos son parte de nuestro pasado, nos acompañan en nuestro presente y siempre estarán en nuestro futuro, escribir una poesía para el día del abuelo es la manera más dulce y tierna de hacerles llegar cuan importante son para nosotros.

Como tú a mi

Tu mirada se perdía en el infinito

tus manos arrugadas prematuramente

me acariciaban con esa ternura tan tuya.

Tu voz me hablaba y me contaba cuentos

mientras yo me dormía cerca de tu corazón.

Te quería tanto como tú a mí.

Nadie ha vuelto a quererme así

te llevo dentro de mi corazón

y nunca podré olvidarte.

Me dejaste tan pronto que no pude

demostrarte cuanto te quería.

Ahora se, que desde allí arriba

tú me miras y sé que me mimas

y me cuidas como siempre.

Y aunque ya no estás conmigo

aunque ya no estés presente

te sigo sintiendo muy cerca

porque nunca te fuiste de mi corazón.

Te quiero mi adorada yaya, merecías haber sido feliz

Comenta y Comparte

Las coplillas de mi abuela

A San Antonio bendito

con devoción y fe

una vela prendí

Pero para no dejarle

todo el asunto al santo,

al pasar por tú lado

te sonreí.

Un suspiro de mi pecho

se escapó:

! Ay amor, mi amor

amor mío!.

Y tú,

 te perdiste en mi mirada,

cuando el suspiro te alcanzó.

Y volviste a perderte

todas las tardes

que a tú lado pasaba.

Y de tanto perderte

encontraste el amor

que yo te daba.

Ahora, tengo que decirte,

no me mires.

que miran que nos miramos

y al mirarnos

comprenden que nos amamos.

He crecido escuchando a mi abuela cantando sus coplillas, mientras me enseñaba a bordar o hacía sus tareas. También he crecido admirando a esa bendita mujer que Dios me dio para aprender de ella.

Ella que como muchas otras, nacieron con el siglo, que vieron pasar por sus ojos y por su vida lo que nosotros hemos aprendido de los libros. Mujeres valientes que pasaron una guerra, que las apartaron de sus seres más queridos, que pasaron la posguerra trabajando como mulas para sacar adelante a sus hijos y sacarlos de la miseria. Mujeres fuertes que nunca perdieron la fe y la esperanza. Que soñaban como nosotros y anhelaban las mismas cosas. Que a pesar de todo nunca perdían la sonrisa, y que en el ocaso de sus vidas fueron, al menos eso espero, queridas, admiradas y respetadas,

Para todas ellas, este poema

Comenta y Comparte

Juana , Abuela de mi alma

Guardaré en mi memoria

mis juegos a tu lado,

las caricias de tus manos

arrugadas en mi pelo,

las caricias y los arrullos

en las noches de tormenta

escondida en tu regazo.

Guardaré siempre en mi alma,

tu sonrisa,

inundando mi habitación

al despertarme

y el baile de tu risa

cuando yo te devolvía

la sonrisa.

Guardaré en mi corazón

el abrigo y el amparo

de tu voz,

cuando me decías:

-! No tengas miedo,

nada malo va a pasar,

porque de ti,

yo siempre cuidaré!

Nunca olvidaré tu mundo

sencillo,

a tu lado, todo era,

claro, ordenado, definido.

Me enseñaste todos los matices

del lienzo de la vida

y me diste la libertad

de hacer yo la composición

de los colores,

para cuando llegaran tiempos

difíciles.

Me enseñaste a ser fuerte,

a pelear con mis demonios,

me diste calma, confianza

y fortaleza.

Ojalá hubiese podido

borrar la tristeza de tus ojos,

pero era reflejo de tu alma

y tu alma estaba

herida.

El tiempo,

jamás borrará tu energía

ni tu luz,

y aunque a veces,

te confieso,

siento la soledad dentro de mi,

como un bloque que me arrastra

a un pozo sin fondo,

te prometo que cuando

las lágrimas amenacen

con derramarse incontroladas,

por ti,

por tu recuerdo, por tu amor, porque

te siento a mi lado,

porque te quiero,

mi rostro, mis ojos,

mi corazón y mi alma,

sonreirán constantemente.

Comenta y Comparte

Por amor

Cuando tu voluntad se enrede,

te daré mi fortaleza,

tu templanza seré.

Una a una tus heridas

sanaré.

Nada te daré,

que tú no quieras.

Te devolveré la sonrisa.

Ordenaré tu vida,

y acomodaré tus sueños.

Las fisuras por donde

se cuelan tus recuerdos

taparé.

No te dejaré huir,

ni de mí, ni de mi mirada.

Intuiré tus pensamientos

y me adelantaré a tus deseos.

A pensar con claridad,

te ayudaré.

Emigraré a tu corazón

y hasta que quieras

allí me quedaré a vivir.

A cambio, solo te pediré

que te reconozcas en mis ojos,

que mi abrazo, te reconforte.

Que sientas el amor

que mis caricias te transmiten,

y que escuches los latidos

de mi corazón,

cuando en mi regazo te refugies

Comenta y Comparte

Poema A UN HIJO


Parte de mis letras se las tengo que dedicar a mis hijos y es a través de un poema para un hijo donde les agradezco el convertirme en madre, el mejor de los regalos.

En poesía para un hijo encontrarás mis letras más dulces, los poemas de una madre a su hijo son los sentimientos más puros que mi corazón ha sentido nunca.

Siento un amor incondicional y una admiración inmensa que reflejo en el poema para mi hija y en los poemas para mis hijos mayores. Un conjunto de poemas que hacen que con una sonrisa todo lo malo desaparezca.

Cuatro amores

Tengo cuatro amores

que en casa me esperan.

Tengo cuatro regalos

que la vida me dio.

Tengo para ellos

un botón de la risa

y cuando lo tocan

mi alma llena de felicidad.

Tengo un botón de dormir

para ahuyentar

los malos sueños.

Tengo palabras

para contarles mil cuentos.

Tengo sonrisas

para regalarles

cada día de mi vida.

Tengo canciones

para cantar y bailar.

Tengo ilusión

para hacerlos soñar.

Tengo magia

para llenar sus vidas de luz.

Tengo un corazón

con cuatro ángeles dentro,

que tiran de mi

que me dan fuerza

que me dan vida.

Tengo cuatro amores…

Mis amores, Sofía , Hugo, Natalia, Héctor, la mayor sorpresa que la vida me dio, por vosotros vale la pena todo y más, os quiero , gracias por elegirme para ser vuestra mamá

Comenta y Comparte

Hijo de mi alma

Hijo de mi alma,

vida de mi vida,

pedacito de mi ser.

Mi Príncipe Valiente,

antes de tenerte,

ya te quería.

Te soñé, te deseé, te lloré,

y te pedí,

que te quedaras.

Yo, te necesitaba,

más que tú a mí.

Y me escuchaste,

fuiste fuerte,

luchaste y te quedaste

conmigo.

Para ser, mi pequeño tesoro,

el que de besos llena mi vida,

de sonrisas mis días,

el pequeño pedazo de cordura

que me ata

a este loco mundo.

Te quiero

hijo de mi alma

Comenta y Comparte

Sofía

Benditos mis ojos

que en los tuyos se miran.

Orgulloso mi corazón

que te tiene en mí.

Felices mis labios

que te besan

y mis brazos

que te abrazan y protegen.

Dulces tus manos

y tierno tu corazón

trocito del mío

que llegaste a darme Alegría.

Brillo en tu mirada

milagro de la Vida

hecha Vida en mí,

tenerte es como

llegar al sol

y ver a Dios

mirándote a ti.

Mis deseos cada día….

que nunca dejes de quererme

que siempre en mi te mires.

Que por ti daría mi vida

y hasta el alma

por tu amor especial

por tu luz

por la alegría

que al darte a luz

tú me diste a mí.

Comenta y Comparte