Una vida entera

Y de repente

una avalancha de palabras

brota desde lo más profudo

de mi

convertidas en versos

pintados de azul.

Palabras que se vuelven susurros,

susurros que se vuelven canciones

que todo lo inundan.

Entonces nuestro amor se expande

se sueltan los amarres,

salimos a bailar

y el deseo nos envuelve,

nos decimos al oído

nos vamos a querer

una vida entera.

Nuestros cuerpos abrazados

llenos de amor

se rinden al porvenir,

el roce de nuestros labios

promete el principio de un beso

que no tendrá fin.

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