No me quisiste bien

Me acomodo en la oscuridad, me abrazo a la ausencia y caigo en los brazos equivocados tú te quedas observando desde lejos.

Cada noche un tacto frío y seco como una roca me hace suya, nunca cierro los ojos siempre contemplo un cielo despejado rezándole a la luna como si fuera una Virgen .

Un lamento silenciado por gemidos oscuros, palabras que se quedan sin voz.

Visitas breves, momentos que no se eligen, vienen y se van, vienen y se quedan como heridas, anticipo de las muchas que vendrán. Escucho mi silencio y escucho su voz, tiemblo, disimulo y yo mientras pienso en ti. Construyo un muro que me pueda proteger, esperanza frustrada, todo me alcanza y se queda en mi como tatuajes para toda la vida.

Se borran todos mis colores y mi cara pálida trata de entender las veces que renegaste de mi mirada pidiéndote que me salvaras ¿Cómo has olvidado mi cara, mis manos , que mis labios solo eran de tu boca? Mi llanto parece entonar una vieja canción de fado, cuando me doy cuenta de que no tengo recuerdos por qué nunca fue real. Me siento y espero hundiéndome cada vez más y poco a poco hacía dentro de la culpa hasta que ya no se como salir de ahí , hundida en la rabia, tu amor ya no es mi consuelo .

Ya nada volverá a ser lo mismo ,no tiene la menor importancia era mi destino, tú mi cazador yo tu presa. No hicimos lo imposible, no fuimos invencibles. Yo me perdí, llegué al fin del mundo y tú no me salvaste, no estuviste junto a mi y a pesar de tanto dolor, del daño que me hicieron, del daño que me hiciste, no fui valiente, tú no me abrazaste y yo no pude saltar aunque perdí el equilibrio.

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