Y se miente

Se lo recuerda a si misma

mientras está delante del espejo,

despierta de un pesado

sueño.

Con súbita desolación

se da cuenta

que se ha dejado llevar

por los excesos

y ahora lo difícil es controlar

el miedo.

Estirar el tiempo,

que pasen los días

entre un caos de recuerdos,

y deseos, dejar de pensar

que es tarde para todo.

Que la vida es eso,

heridas que se niegan a curar

y aún así todo sigue en su lugar,

como la voz de un tiempo pasado.

Lágrimas viejas,

un pedazo de cielo sin estrellas.

Las noches en vela

en una casa vacía,

una vida llena

de secretos y pensamientos

errantes.

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